Mary Flora Bell, fue conocida por los
medios como la “Niña Asesina” por haber asesinado a dos niños de cuatro y tres
años de edad. Mary Bell tenía diez años, Hija de Betty Bell, una prostituta que
abusaba de ella psicológicamente y la obligaba a participar en actos sexuales
con sus clientes desde temprana edad.
“Yo no quería a mi hija, varias veces la traté de matar, poniéndole drogas revueltas con sus dulces, causándole sobredosis, también la usé como juguete sexual con algunos de mis clientes desde que tenía un año de edad”
Confeso a
los periodistas Betty Bell
Betty Bell
Su madre, era
Betty Bell nacida en Glasgow en 1940, siendo descrita como una niña
profundamente religiosa, según su familia quienes creían que sería monja, ya
que le gustaban las cosas religiosas, no sufría muchos castigos o abusos, pero
por alguna razón, empezó a cambiar. Cuando murió su padre, sufrió una sobredosis por drogas, el 26 de
mayo de 1957 con 16 años dio a luz a
Mary Flora Bell, el padre de Mary se convertiría en un misterio, Mary pensó durante mucho tiempo que su padre era
Billy Bell, un criminal local, que había sido detenido por robo a mano armada, quien se había casado
con Betty tiempo después del nacimiento de Mary, pero su padre biológico es un desconocido
hasta el día de hoy.
La infancia de Mary fue una pesadilla de
abandono y sobredosis por drogas, de vez en cuando su madre se ausentaba de la casa,
viajando a Glasgow por motivos de trabajo, Mary
fue su primera hija, personas no pertenecientes al círculo familiar señalaron
que Betty intentó en más de una ocasión asesinar a Mary y hacerlo aparentar
como un accidente, en los primeros años de vida de la pequeña, la propia Mary
señaló que fue víctima de abuso
sexual por parte de su madre más de una vez,
diciendo que ella la obligaba a participar en actos sexuales con hombres desde los
cuatro años de edad, aunque su madre declaró luego que la primera vez que
abusaron de Mary tenía un año de vida. Betty ansiaba deshacerse de su hija, y la
dejaba al cuidado de familiares aunque siempre volvía por ella, en 1960, llevó
a Mary a una agencia de adopción, dándosela a una mujer perturbada que no podía
adoptar ya que se iba a Australia. Isa, la hermana de Betty, quien la había
seguido, encontró a la mujer, que ya le había comprado un traje a Mary.
A los 2 años, Mary se negaba a relacionarse con
los demás, comportándose ya de manera fría y distante, nunca lloró cuando la
dañaban, y empezó a arremeter violentamente, rompiendo la nariz de su tío con
un juguete, los rechazos y reuniones de su madre no ayudaron. Mary fue
testigo de como un autobús mataba a su amigo de 5 años. En 1961, fue a la
guardería, según cuenta su profesora, una vez la vio con las manos alrededor
del cuello de otro niño, cuando le dijo que no hiciera eso, respondió
"¿Por qué? ¿Podría matarlo?". Ella era solitaria, y los demás niños
se reían de ella. Mary golpeaba y
pellizcaba a los demás niños, y disfrutaba de sus gritos.
Mary sufrió sobredosis por drogas, cuando tenía
tres años, los encontraron a ella y a su hermano comiendo "pequeñas
pastillas azules" con los caramelos que su tía Cath le había traído. Betty
dijo que debían de haberle cogido el frasco del bolso. Cath y su marido se
ofrecieron a adoptar a Mary, pero Betty no lo permitió, cortando el contacto
con su familia. En la peor de las sobredosis, Mary se tragó un puñado de
pastillas de "hierro" que pertenecían a su madre. Perdió la
conciencia y tuvieron que extraérselas del estómago. Su madre practica
sadomasoquismo con sus clientes, y Mary la vio más de una vez golpeando a sus
clientes.
El 25 de mayo de 1968, un día antes de cumplir 11
años, Mary Bell estranguló a un niño de 4 años llamado Martin Brown, en una
casa abandonada, estaba sola al momento del asesinato. Entre ese momento y el segundo
asesinato, ella y su amiga Norma Bell (quien no tenía relación familiar con
ella) de 13 años, entraron en una enfermería en Scotswood y cometieron actos de
vandalismo, dejando notas donde se responsabilizaba por el asesinato, la Policía desestimó este
incidente diciendo que era sólo una broma.
En cuanto al asesinato de
Martin Brown, la versión de Mary es cambiante, siendo desde un accidente a una
compulsión inexplicable. Dijo que se peleó con su madre y que, por primera vez,
le devolvió el golpe, cuando apretó el cuello de Martin.
Norma
El 31
de julio de 1968 Mary y su amiga Norma (de
13 años) cometieron un segundo asesinato por estrangulación, esta vez a un niño
de 3 años, Brian Howe fue hallado muerto y cubierto de maleza, su
cabello fue cortado, se encontraron marcas de pinchazos en sus muslos, y la
piel de sus genitales fue removida parcialmente. Además de estas marcas y
lesiones, las letras “MB” habían sido impresas en su estómago. Originalmente
había sido una “N”, pero Mary añadió una línea para que se viera como una “M,”
El niño de tres años de edad, había sido estrangulado hasta la muerte. En pocos
días las investigaciones conectaron los 2 crímenes y ambas niñas fueron
detenidas y acusadas de asesinato. El caso era bastante desconcertante las
declaraciones de Mary asustaban a los policías y los psiquiatras decían que
tenía claros síntomas de psicopatía, cuando se inició la investigación, Mary Bell confesó los crímenes. Las niñas eran muy
jóvenes y sus testimonios se contradijeron mucho, por lo que nunca se supo con
claridad lo que sucedió. En principio la muerte de Martin Brown fue declarada
como accidente, ya que no había pruebas de nada extraño. Sin embargo, la muerte
fue vinculada con el asesinato de Brian Howe y finalmente en agosto las dos
niñas fueron detenidas y acusadas de dos cargos de asesinato en segundo grado.
Victimas |
June Richardson Madre de Martin
Norma fue absuelta de los cargos, pero Mary fue
el centro de atención de la prensa, su madre concedió muchas entrevistas, y
luego de muchos análisis psicológicos Mary fue sentenciada a “prisión
indefinida”, Mary fue procesada, pero era demasiado joven para estar en una
prisión y muy peligrosa para ser mantenida en un hospital psiquiátrico o en una
institución que albergaba a niños con problemas. Su madre vendió varias veces
información de la historia de Mary a la prensa en el momento del juicio y la
condena de su hija. Mary tenía sólo 11 años en ese momento.
En el juicio, el psiquiatra
que la examinó testifico que exhibía los síntomas clásicos de la psicopatología
(o sociopatología) por su falta de sentimientos hacía los otros. Los abusos de
su madre y el daño físico por las repetitivas sobredosis contribuyeron a su
sociopatología. No solo era incapaz de relacionarse con otros con afecto, sino
que respondía de la misma manera en la que era tratada. Cuando una madre es la
fuente del miedo, algunos le hacen frente desarrollando mecanismos protectores
contra el mundo exterior, que, para el sociópata en desarrollo, es una amenaza
constante. No todos los niños que crecen entre abusos se convierten en
sociópatas. También influyen los factores genéticos y daño neurológico. Mary no
mostró signos de estar satisfecha tras matar a Brian, era violenta con los
animales, se orinaba en la cama hasta la edad adulta, y aunque no inició
fuegos, destrozó bienes ajenos en su corta carrera como asesina.
Mary Bell fue liberada el 14
de Mayo de 1980 y permaneció en Suffolk. Su primer trabajo fue en una guardería
local, pero los agentes de la libertad vigilada temían que fuera un trabajo
inapropiado para ella. Tomó trabajos como camarera y fue a la universidad, pero
estaba demasiado desanimada para seguir. Después de volver con su madre,
conoció a un hombre y se quedó embarazada, esto provocaba una gran
preocupación, ya que no se sabía si habiendo sido capaz de matar a dos niños
sería capaz de ser madre, aunque luchó por el derecho de quedarse con su hija,
que nació en 1984.
Mary afirmaba que era consciente de sus crímenes, ella insistió:
Mary afirmaba que era consciente de sus crímenes, ella insistió:
"Si había algún mal en
mí cuando era una niña, ya no estaba. Sentí que si pudieran ver mi interior con
rayos X, podrían ver que cualquier cosa rota estaba arreglada".
De alguna manera, Mary Bell había
hecho una transición, pasó en corto tiempo de una niña asesina a una madre cariñosa, sus
años en el reformatorio y prisión le dieron abusos sexuales y adicción a las
drogas. Sin embargo, afirma tener una nueva conciencia moral y un profundo
dolor por sus crímenes.
Con el tiempo, conoció a un
hombre y se enamoró, asentándose en un pequeño pueblo, pero el agente de la
libertad vigilada debía informar a las autoridades locales de su presencia, y
pronto los habitantes del pueblo salieron a la calle con señales de
"¡Asesino fuera!". Vivió con un miedo constante a ser descubierta.
Al intentar explicar que le pasaba por la mente cuando era una niña, especialmente durante los arrebatos de violencia, Mary solo reconocía parcialmente su comportamiento, y tenía problemas confesando su tendencia a ahogar otros niños.
Al intentar explicar que le pasaba por la mente cuando era una niña, especialmente durante los arrebatos de violencia, Mary solo reconocía parcialmente su comportamiento, y tenía problemas confesando su tendencia a ahogar otros niños.
Mary permitió a Betty ser
parte de su vida, incluso viviendo con ella tras salir de prisión, a pesar de
los abusos a los que su madre la sometió. Quería que su propia hija conociera a
su abuela. Betty prostituyó a su hija de todas las maneras posibles. Primero la
vendió a sus "johns", para después vender su triste historia a los
tabloides. No podemos saber la magnitud del daño de Betty a su hija, en la
actualidad Betty está muerta.
Mary tuvo una hija en 1984, cuya identidad fue protegida
hasta cumplir sus 18 años, su hija no supo del pasado de su madre hasta que
unos periodistas ubicaron a Mary y la acosaban para dar la cara. Mary pidió en
2003 que le den un definitivo anonimato por el resto de su vida para poder
vivir en paz con su hija y su futura nieta, la Corte Suprema se lo
concedió.
Pese
a la rehabilitación y nueva identidad de Mary Bell, la sociedad no olvidó su
atroz historia y los periódicos siempre descubrían donde estaba. Nadie quería a
Mary Bell cerca, pasa su vida huyendo y escondiéndose, fingiendo ser otra
persona hasta que alguien la identifica y tiene que volver a marcharse, la
huella de sus crímenes la perseguirán siempre.
Mary Bell dijo que le gustaba
lastimar a quienes eran más débiles que ella, al cometer ese acto, el de “dañar
a los más débiles” inconcientemente recreaba el momento en el que ella era la
débil y victima del adulto que la lastimaba de forma sexual y físicamente.
Nunca se tomo en cuenta durante el juicio su espantosa vida familiar, todo lo
que se madre le hizo, el intento de asesinato con tranquilizantes, abandonarla
en repetidas veces, y hasta involucrarla en actos sexuales con sus clientes,
todos estos factores ayudaron a la
creación del un monstruo, por supuesto no todos los niños abusados son
asesinos, pero en el caso de Mary Bell su madre fue la causante de todo, la
única pregunta que viene a mi mente es ¿Por qué Betty Bell no fue enjuiciada y
enviada a la cárcel por los intentos de asesinato contra su hija por los constantes
abusos sexuales a los que sometió a su niña desde muy pequeña? Hoy Mary Bell
vive en el anonimato y en el 2009 fue abuela, hasta el momento no cometió otro
crimen.
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