sábado, 1 de octubre de 2011

Mitos y Leyenda "Los Espejos"-Lucila Castro Díaz










Mitos Y Leyendas “El Espejo”
No se sabe con seguridad cuándo apareció el espejo en la vida del hombre; lo cierto es que se encuentra desde la más remota antigüedad, en los mismos albores de la Humanidad, cuando todavía no existía la Historia, tan sólo oscuros recuerdos, relatos y leyendas fantásticas. Se han encontrado espejos en todas las civilizaciones, en América, Asia, África y Europa. Aunque para este siglo materialista el espejo sea tan sólo un objeto de uso corriente en nuestro aseo diario, para aquellos hombres además tenía una finalidad religiosa y mágica, y se utilizaba de muy diversas formas.

Los Espejos

Desde el comienzo de la existencia de la humanidad, que todo aquello que refleje la realidad estaba ligada al ocultismo. Para los antiguos pobladores de nuestro mundo verse reflejados en espejos de agua era verse su propia alma. Una vez que se creo el espejo, este paso a ser adoración para muchos, por ende todo lo que deslumbra y enceguece era tomado como una mala señal, y paso a ser otro objeto relacionado con fenómenos paranormales y rituales tanto religiosos como paganos.
Muchas cultural creen que al ser capaz de reflejar tiene la capacidad tanto de mostrar y de atrapar el alma de quien se  refleja, por esto a partir de que esta creencia se hizo popular, muchas personas cubren los espejos con lienzos negros durante un velatorio o también en la habitación de algún moribundo, o  bien no es casual que tanto las salas de terapia intensiva como la sala de guardia en los Hospitales no haya espejos, en los cementerios muchas lápida que hallan sido lustradas o que generen algún tipo de reflejo son rotas o ensuciadas por personas que creen en esto, ya que también se cree que los espejos son una puerta al más allá.  A los espejos también se los relaciona con un plano mágico, según citan los antiguos escritos, se los han usado de oráculo, los adivinos de los siglos pasados sumergían un espejo con marco de plata en el agua para adivinar el futuro, según la claridad que podía apreciarse en el espejo, era señal de que la persona tendría larga o corta su existencia, también podían ver si esa persona tendría muchas penas en su vida.
Algunas personas que tiene el don de la clarividencia pueden divisar imágenes que les brindan información detallada del futuro, estos dones trascendieron, pasaron a formar parte de historias populares de muchas leyendas urbanas, que hablan de apariciones malignas en los espejos, de espíritus atrapados, como la conocida leyenda popular de “Maria Sangrienta” una joven que creyeron muerta tras sufrir de catalepsia y fue enterrada viva con sus pertenencias entre ellas el pequeño espejo que la joven atesoraba, despertó luego en su cripta y se rasguño la cara en la desesperación, de ahí que la leyenda cuenta que si repetís 9 veces Maria Sangrienta frente al espejo a la medianoche ella se aparece y te hace cortes con sus uñas en el rostro. También comenzó a conocerse esta leyenda como la leyenda de “Verónica la joven Bruja” una joven que realizaba magia negra y se burlo de los espíritus y de recompensa la madre la encontró muerta en su cuarto frente a un espejo que solía usar para sus hechizos, a la joven le habían cortado la cara con unas tijeras y había muerto de un fuerte golpe en la cabeza, la leyenda dice que si repetís 9 veces verónica en el espejo con unas tijeras abiertas y una vela encendida, ella aparece en el espejo y te pide que le digas su fecha de muerte a cambio de lo que desees, pero ojo porque en caso de fallar ella se llevara en vano a la persona que la invoco.
Para la cultura oriental los espejos están dotados de un gran poder místico, y son elementos capaces de espantar a los malos espíritus. También representan una ofrenda al mundo espiritual, y por ello eran colocados en tumbas imperiales.
Los espejos también han sido y son considerados portales que comunican al más allá, portales por los cuales los fantasmas pueden ir y venir, se comunican con otro mundo, uno muy similar al nuestro, pero donde nada es lo que parece. Muchos relatos son de personas que afirman a ver visto reflejados a seres que en realidad no estaban allí, o que se han visto a seres muy similares a ellos mismos, que vieron a su otra parte o a familiares que no están. El espejo ocupa un lugar muy  importante en la mitología y las supersticiones de diferentes culturas y pueblos, la imagen que se refleja se identifica con el alma de quien se esta reflejando, es por ello que se dice que los vampiros no se reflejan en los espejos, puesto que son cuerpos sin alma, por lo tanto seria imposible que se vieran retratados en ellos. El mundo de los espíritus tiende a imaginarse como un mundo inverso al mundo de los vivos, en la segunda parte de las aventuras de Alicia.
En el cuento de “blanca nieves” el espejo tiene la facultad de hablar y de responder cuantas preguntas le hace la malvada madrastra de Blanca Nieves, y recordemos que esa malvada mujer era bruja por la tanto estaba hablando con un espíritu, “La Bella y la Bestia” la bestia puede ver a través del espejo lo que sucede en el mundo real, único contacto con el mundo real., muchos cuentos infantiles son verdaderamente terroríficos. También es notable el Espejo de la Sabiduría, en el que se refleja ”Todas las cosas del cielo y de la tierra excepto el rostro de quien se mira en él” descrito por Oscar Wilde en el cuento El Pescador y su alma.
El Espejo de la Melancolía de Alejandra Pisarnik nos deja retratado una visión reveladora sobre la condesa Elizabeth Bathory, “La Condesa Sangrienta” una condesa que asesino a 650 niñas, Fragmento que aun recuerdo, “…Vivía delante de su gran espejo sombrío, el famoso espejo cuyo modelo había diseñado ella misma… tan confortable era, que presentaba unos saliente donde apoyar los brazos, pudiendo permanecer muchas horas frente a él sin fatigarse…”
Sea cual fuere la verdad de los espejos, las miles leyendas fantásticas que rodean  su torno, capaces de reflejar nuestra realidad al revés de cómo la vemos, han traspasado las barrera de los siglos, culturas y creencias, hasta instalarse en la conciencia popular.










Leyendas sobre Los Espejos

7 años de mala suerte y Portales para los espíritus

Los espejos siempre fueron involucrados con las leyendas, un ejemplo claro es el que dice que si rompes un espejo te llegaran 7 años de mala suerte. Antiguamente se creía que los espejos ofrecían a aquellos que se mirara en ellos un reflejo de su propia alma, de aquí proviene la creencia de que dañando un espejo te dañas a ti mismo. Por Otra parte los romanos en el siglo I añadieron un nuevo matiz, sostenían que la salud de una persona cambiaba en ciclos de siete años, y puesto que los espejos reflejaban la apariencia de una persona, es decir, su salud, un espejo roto anunciaba siete años de mala salud y de infortunios. Los espejos entonces son "reflejantes" de imágenes, así, el quebrarlos representaría quebrar una imagen, y por lo tanto alterar el orden. Tambien se decía que era de mala suerte porque eran muy costosos y tardabas 7 años en juntar su valor económico.
Otra dice que si sitúas un espejo frente al otro se crea un portal infinito donde los espíritus pueden transitar libremente dentro del mundo de los vivos. Otra dice que el día 31 de diciembre a las doce podes ver al diablo y pactar con el.

Vampiros y Espejos:

“No proyecta sombra no reflejo en los espejos” La frase pertenece al profesor Van Helsing en la novela de vampiros de Bram Stoker, Drácula, (1897) Los vampiros  son cuerpos sin alma no pueden reflejarse de ninguna manera, Drácula huye al ver a Jhonatan Harper afeitándose frente al espejo, los vampiros más modernos muestran menos rechazos a los espejos pero deberían no reflejarse, repito no tiene alma.
En la concepción medieval los vampiros son criaturas sin alma, no se diferencian de los cadáveres son muertos que viven de la sangre, la literatura y el cine se encargaron de solidificar el cambio.

Reflejos de cuerpos sin Alma y sus consecuencias

Desde la edad media, existe un tabú con respecto a los muertos y los espejos. El reflejo de un cuerpo sin alma trae consecuencias nefastas, durante las vigilias junto al cadáver se toma la precaución de quitar los espejos o de cubrirlos con lienzos negros ya que si el cuerpo era reflejado se producía inevitablemente otra muerte en la familia.
En Roma cuando había un muerto en la casa o un moribundo se escondían hasta los utensilios de bronce para evitar cualquier tipo de reflejo.
En Grecia se escondían los espejos y superficies metálicas.

La leyenda del Oriental del Espejo

Cuenta esta leyenda en una época en que aún no se conocían los espejos, todos tenían un doble de sí que habitaba pacíficamente este mundo y que no interfería en absoluto en la vida de los hombres, al punto que nadie jamás se cruzaba con su doble, porque así eran las cosas y no se sabía por qué ley no escrita, ni dictada por quién, estaba prohibido transitar por los mismos lugares. 


Pero la ambición de aquellos oscuros personajes pudo más y quisieron ser únicos, apoderarse del mundo conocido y someter a sus hermanos en la imagen. Se desataron cruentas y crueles batallas; una guerra de nunca acabar en la que las bajas de uno y otro bando ya nadie sabía contar. Como reza un viejo adagio: una guerra no es tal hasta que un hermano no mata a su hermano. De un lejano monasterio enclavado en las montañas comenzaron a escucharse unos cánticos que pronto fueron inundación, lo invadieron todo, ocuparon cada rincón del mundo y cercaron a los dobles, los inmovilizaron, les dieron caza hasta encerrarlos en unos luminosos objetos que aquellos monjes habían recibido de la mano de no se sabe qué divinidad, ni qué precio habían pagado. Finalmente la victoria fue alcanzada. Se ganó la guerra y nuestros hermanos fueron encerrados en los espejos y condenados por la eternidad a repetir cada uno de nuestros movimientos y sólo a gozar de cierta libertad cuando nosotros nos alejamos considerablemente de los luminosos artefactos. Hay quienes dicen que tal condena eterna es solamente una quimera, que no podrá durar, que de hecho, no ha durado. Que la guerra ha comenzado lentamente, que ya se pueden ver pequeños indicios del comienzo de la rebelión, pequeños indicios en una mano que no acompaña el movimiento de una mano que se movió, en un giro que no es acompañado desde el otro que habita en el espejo, en una mirada que se dirige hacia otro punto, quizá donde se están congregando las huestes, prontas para atacar. Pequeñas señales de que la guerra ya ha comenzado. Pero, aún más. Algunos sabios afirman y lo comentan en voz muy baja, que nunca hemos ganado ninguna guerra, que eso es sólo una ilusión que nos hacen creer nuestros oscuros hermanos y que en verdad somos nosotros quienes vivimos presos en un espejo, condenados por la eternidad a repetir los movimientos, los gestos y las miradas de los oscuros, que hace mucho tiempo, tanto que la memoria no alcanza a medir, ganaron su guerra y nos dejaron aquí, presos, con la sola rebeldía de unas pocas palabras que nos podrán permitir, algún día, quizás, empezar por no mover una mano, no acompañar un giro, no obedecer a una mirada. 








Narciso El rostro atrapado en el espejo

“Espejos de metal, enmascarados, espejo de caoba que la bruma de su rojo crepúsculo disfuma, ese rostro que mira y es mirado.”
Jorge Luis Borges

Juno castigó a su empleada por ser traviesa y charlatana, su castigo fue decir la última palabra, que escuchaba de otra persona. Corrió hacia el bosque muy triste. Un día vio a un joven llamado Narciso y al instante se enamoró, él había dicho algo y ella lo repitió, se miraron y la interrogó, pero sólo consiguió que repitiera la última palabra.
Juno castigó a Narciso, enamorándose de sí mismo, al verse reflejado en el lago. Cuando la joven se enteró, fue rápidamente a ver lo que pasó. El se había ahogado de tanto mirar su reflejo en el espejo de agua, a orillas creció una flor ella la tomo.











Fragmento.

«Puedo ordenarle al espejo que revele muchas cosas —respondió ella— y a algunos puedo mostrarles lo que desean ver. Pero el Espejo muestra también cosas que no se le piden y éstas son a menudo más extrañas y más provechosas que aquellas que deseamos ver. Lo que verás, si dejas en libertad al Espejo, no puedo decirlo. Pues muestra cosas que fueron y cosas que son y cosas que quizá serán. Pero si fueron, son o serán, ni siquiera el más sabio puede decirlo.»
— Galadriel en «El Espejo de Galadriel», El Señor de los Anillos de J. R. R. Tolkien.











4 comentarios:

  1. Lindas fotos, interesante, muy interesante articulo. Como el mismo fuego, no se sabe el momento, ni el lugar, en donde se comenzó a usar, los espejos tiene algo en común con el fuego. Nos muestran imágenes que resplandecen con la luz.
    Siempre e temido a los espejos, Catoptrofobia o Esiptrofobia, así se llama al temor de mirarse a un espejo...

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  2. Muchas gracias Rodrigo por visitar mi blog, saludos

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  3. Impresionante Arte Escrito...
    Felicitaciones....
    Porfavor sube Historias de leyendas urbanas antiguas, como las de terror, y dramas de crimen...
    dexter.ahuachapan@gmail.com

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